Desayunos, comidas y ... "brunch"
Evidentemente, como todo restaurante, el punto más importante del servicio es la comida. Y, por lo tanto, tenemos que ofrecer buenas opciones, con la mejor calidad posible y, además, que resulten placenteras para los paladares de nuestros clientes. Pero algo tenemos que tener claro: el ciclismo es un deporte que va más allá de pedalear, ya que también es una manera de vivir la vida.

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La mayoría de los ciclistas optan por adquirir buenos hábitos de vida y apostar por una alimentación sana y adecuada para el deporte que realizan. Los restaurantes "bike friendly" se especializan sobre todo en desayunos, para poder ser la comida que da el pistoletazo de salida a la jornada; en almuerzos, para recuperar energías y calorías con la comida más importante del día; y el brunch, una comida ligera entre desayuno y comida para renovar fuerzas.

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Debemos tener en cuenta, por lo tanto, que hay que adaptarse a los horarios de los ciclistas, intentando abrir a primera hora: las rutas suelen empezar pronto por la mañana para poder aprovechar el día y las horas de sol. También hay que estar preparado para acoger, durante toda la mañana y el mediodía, clientes que esperan platos sanos, elaborados y completos.
La bicicleta es un cliente más
Como es de esperar, el cliente principal de un local "bike friendly" es ciclista y eso quiere decir que tenemos que poner las cosas fáciles para que se pueda acceder con la bicicleta. Podemos preparar zonas para aparcar la bicicleta, habilitar caminos dentro del local para circular con la bicicleta, acompañar las escaleras con pendientes y, todo ello, ofreciendo suficiente espacio y comodidad para todos los clientes.

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También podemos optar por complementar los servicios anteriores con detalles como ofrecer comida y bebidas energéticas para llevar, comercializar algunos accesorios para ciclistas o administrar herramientas y productos para la limpieza y el mantenimiento de la bici.
Ambientación "bike friendly"
Crear y fomentar una ambientación ciclista ayudará a hacer crecer la experiencia de nuestros clientes. Algunos locales decoran las paredes con maillots de varios colores o cuelgan bicicletas, de las más clásicas hasta las más modernas. También podemos optar por ser aún más originales y decorar el local con piezas de bicicletas, como los cuernos, el cuadro, el manillar o las ruedas. Otra manera de mejorar la estética es decorar el local con fotografías, sea de ciclistas profesionales o de clientes que han pasado por el restaurante y voluntariamente se han hecho una fotografía.

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